Conseguir que los estudiantes que participan en el aprendizaje es el objetivo final de todos los maestros, sin embargo, suele ser la más desalentadora y difícil de lograr.
Vivir en una edad digital enfocada en dispositivos de alta tecnología están dominando a los estudiantes, la atención y el enfoque puede ser más complicado aun, ya que los estudiantes se conectan a múltiples tareas y usan sólo ráfagas fragmentadas de atención. Como maestros, tenemos que competir con todas estas características de distracción para obtener el foco de nuestros alumnos e involucrarlos en el proceso de aprendizaje. Es difícil pero posible.
La siguiente inforgafía que tenemos para vosotros hoy, presenta algunas discrepancias interesantes en cuanto a las características y atributos de los alumnos participativos y no participativos. Los invito a echarle un vistazo y compartir con nosotros lo que piensas de la misma.
Vía: Shiftelearning
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